viernes, 7 de febrero de 2014

Proyecto: Pluralidad Religiosa

Diversidad de cultos. 


Actualmente uno de los principales objetivos de de los colegios y escuelas de Colombia es erradicar la discriminación que de maneras diversas existe entre los actores del sistema educativo, dado los alcances de la ley 1620 del 15 de mayo de 2013 por la cual se crea el Sistema Nacional de Convivencia Escolar, entre otros, la aceptación de las diferencias de los demás generando ambientes de paz y respeto por la libertad de cultos dentro del aula de clase y su entorno.
En este contexto del manejo del área de religión y sus prácticas dirigidas por los docentes, teniendo en cuenta la hegemonía de la religión católica dentro de las comunidades educativas del municipio llama poderosamente la atención y durante las primeras prácticas realizadas, se evidencia la falta de atención que se les presta a los estudiantes (niños y niñas) que no pertenecen a esta religión o que no poseen un vínculo religioso como tal. 

 
Lo anterior se viene dando particularmente desde la primera práctica, la cual se desarrolló en el grado 1-7 de la Sede Libardo Madrid. En esta práctica se observó que la maestra titular lleva cada 8 días a sus estudiantes a misa, durante la ceremonia algunos niños se paraban, hablaban e inclusive golpeaban a sus compañeros para sabotear. Estudiando un poco el comportamiento de estos infantes y de igual modo interactuando con ellos se supo que su actitud se debía a que no pertenecían a la religión católica, por lo tanto les interesa poco participar de este evento. Al hablar con la maestra titular, ella expresó que habían aproximadamente cuatro estudiantes pertenecientes a “Los testigos de Jehová”, dos más a el grupo “MIRA” y otros tres pertenecientes a una religión de cultura local (Chocó). En el momento en que llegaron todos los estudiantes al aula de clase, la maestra se dirige a ellos diciéndoles: “El comportamiento en la iglesia el día de hoy fue muy malo” Se dirigió a unos estudiantes en particular para llamarles la atención y termino diciendo: “Para evitar futuros inconvenientes en la iglesia, a partir de hoy los estudiantes que no pertenecen a la religión católica, llegan los martes a las 8:00 a.m. después de que se haya acabado la misa”. Esto que acaba de hacer la maestra inquieta demasiado, pues esos nueve estudiantes están siendo excluidos del grupo. Es ahí donde nace el interés por conocer aún más sobre cómo se dicta la clase de religión, ¿cómo se le está enseñando a un niño de religión católica y cómo a uno que no pertenece a ésta o que no pertenece a ningún tipo de vínculo religioso? ¿Qué plantea el PEI Institucional frente a la diversidad y libertad de cultos dentro del aula de clase y su entorno? ¿Qué estrategias utilizar para atender los diferentes cultos que encontramos en el aula? ¿Cómo debe asumir el maestro en formación la diversidad o libertad de cultos dentro del aula en el momento de dictar una clase de religión?, etc. Preguntas como las anteriores, son cuestionamientos que probablemente pocas personas se han detenido a analizar y buscar soluciones, pero que si se organizan de una forma adecuada llega a ser un gran tema a investigar.

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